El cierre fiscal, es una fase anual que puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza para los empresarios, no obstante, es un proceso crítico para el buen funcionamiento de cualquier empresa. Se trata de mucho más que simples números en un papel; es la clave para mantener la salud financiera y cumplir con las obligaciones tributarias.
En el corazón del cierre fiscal se encuentra la necesidad de tener la contabilidad de la empresa clara y organizada, este paso fundamental implica calcular las cuentas de resultado, registrar las utilidades o pérdidas, y cumplir con los pagos de impuestos y deducciones. Para muchos empresarios, este proceso se convierte en un verdadero desafío, y es aquí donde un contador se convierte en un aliado invaluable.
Contar con un profesional que se encargue de los análisis y estados financieros no sólo aligera la carga del empresario, sino que también ayuda a prevenir errores que podrían resultar en multas. Por tal motivo, es esencial tener claridad en los libros contables, un estado de cuenta ordenado y los ajustes fiscales preventivos, para presentar con éxito la declaración de Impuesto Sobre la Renta (ISR).
Procedimiento Simplificado de Tributación (PST), un respiro para las pymes
Para las pequeñas y medianas empresas, el Procedimiento Simplificado de Tributación (PST) emerge como un salvavidas. Este enfoque simplificado permite liquidar el impuesto sobre la renta y el ITBIS de manera más accesible, adaptándose a los ingresos o compras de la empresa. Sectores como el comercial de provisiones al por mayor y detalle, colmadones, farmacias y más, pueden beneficiarse de este procedimiento.
Los principales beneficios del PST son una verdadera bocanada de aire fresco para las pymes, debido a que:
- No requieren contabilidad organizada: Eliminando una barrera significativa.
- No pagan anticipos de ISR: Aliviando la carga financiera.
- Sin impuestos a los activos: Menos preocupaciones para el balance.
- Acuerdo de pago automático para el ISR: Facilitando la gestión financiera.
- Periodo libre de pago de ISR en los primeros 6 meses: Un respiro adicional.
- Exención de remitir informaciones de comprobantes fiscales: Simplificación administrativa.
Errores comunes y soluciones inteligentes
Uno de los mayores errores en la declaración de ISR es la discrepancia en los montos reportados. Para evitar este obstáculo, se recomienda una comparación meticulosa entre el estado de cuenta de la empresa y el cuadre fiscal, abordando cualquier diferencia antes de presentar la declaración. Un enfoque preventivo puede salvar a las empresas de complicaciones innecesarias.
La Dirección General de Impuestos Internos ofrece un servicio especializado para pequeñas y medianas empresas, brindando asistencia en diversas áreas y orientación sobre las obligaciones tributarias. Aprovechar estos recursos puede marcar la diferencia entre enfrentar el cierre fiscal como una carga abrumadora o como una oportunidad para fortalecer la salud financiera y el crecimiento sostenible de la empresa.