Las apps financieras para el smartphone son aliadas óptimas en la gestión de pymes
Un teléfono inteligente permite, entre otras funciones, hacer/recibir llamadas, enviar mensajes de texto, revisar el correo, chatear, navegar en internet, tomar fotos, hacer vídeos y descargar aplicaciones que simplifican la vida. En lo que se refiere a tu pyme, puedes verificar tus productos financieros, hacer transferencias, pagos, controlar tus tarjetas de crédito, pago de nómina, recibir avances y otros servicios que con mucha fiabilidad te ahorran tiempo y dinero.
Este dispositivo se ha convertido en centro de operaciones de muchos gestores de pyme por las recientes tendencias de los entornos laborales en los que el empleado tiene una gran movilidad, aumenta el trabajo colaborativo y se incrementa la deslocalización. Pero, ¿lo estamos usando de forma profesional? ¿Hasta qué punto se pueden compartir contenidos de tu pyme a través del móvil?
La clave es que tanto la pyme como su gestor sepan adecuar su uso a sus funciones y así sacarle el máximo partido en perfiles financieros, tecnológicos y comerciales. Examinando comportamientos, ahora hay un mayor equilibrio entre lo que se puede hacer y lo que no, y lo que ahorras en costes y tiempo, tanto para la pyme como para ti, siempre que sepas identificar la correcta utilización para cada situación.
Juan Quintanilla, director de Desarrollo de Negocio del grupo Funciona, señala algunos de los usos que convierten al smartphone en una herramienta profesional:
Gestión de tareas: organizar actividades de tu pyme, convocar reuniones o confirmar la asistencia son algunas de las funciones que ofrecen las soluciones más comunes para móviles. Facilitan las gestiones y permiten a los profesionales optimizar su tiempo.
Seguimiento: se trata de informar del estado de un proyecto. Los profesionales que están trabajando en esa actividad reciben notificaciones sobre las últimas actualizaciones y pueden intercambiar opiniones de forma inmediata. El objetivo es mejorar la productividad de tu pyme y evitar fallos de coordinación cuando los empleados trabajan desde ubicaciones diferentes.
Formación: otra de las apuestas está siendo la elaboración de cursos a través del móvil. De esta forma, las pymes otorgan flexibilidad a sus empleados para que estudien según su disponibilidad, a la vez que permite el uso de recursos variados: texto, vídeo y audio.
Personal: el uso del correo electrónico o gestionar las tareas a través del teléfono personal son las prácticas más extendidas a la hora de usar el smartphone como elemento de trabajo. Los profesionales y las pymes se encuentran ahora con el reto de establecer de forma clara el tipo de contenidos corporativos que se pueden compartir y, por supuesto, poner límites a la disponibilidad de 24 horas en la que se puede usar el móvil propio para resolver temas de trabajo.
Las pymes deben ofrecer los recursos adecuados a sus empleados para dominar el lenguaje digital y saber trabajar en equipos localizados en diferentes lugares, dos habilidades que se exigirán cada vez más a medida que se sigan implantando soluciones de movilidad.
La importancia de la seguridad
Para que el uso del smartphone por parte de los empleados de tu pyme sea eficaz se requieren tres elementos fundamentales: una muy buena red que permita trabajar con velocidad en cualquier lugar, equipos a precios competitivos y seguridad en los mismos. Una buena decisión es usar un teléfono a nivel personal y otro para trabajar, aunque eso depende de cada uno. También se recomienda no descargar contenidos de origen desconocido (por ejemplo, enlaces que se envían a través del correo o documentos que se comparten a través de los servicios de mensajería instantánea).