La pandemia de la COVID-19 ha afectado en gran manera a todos los negocios del mundo.
El negocio de la música y el espectáculo es uno de los que más ha sufrido este brusco cambio de paradigma.
Si bien podríamos decir que esta industria, desde hace varios años ya, ha hecho uso de los
recursos digitales que hoy son tendencia, la gran mayoría de los músicos siguen ganándose la vida tocando en vivo. Esta estructura resultó golpeada por la pandemia por la necesidad de los confinamientos, toques de queda y restricciones de aforos.
Según el
Foro Económico Mundial (FEM), el
negocio anual de la música representa más de 50,000 millones de dólares en todo el mundo y sus principales fuentes de ingresos son dos: la música en vivo, que significa más de la mitad de esos ingresos, y la música grabada, que gana dinero a través de las
descargas digitales, las plataformas de
streaming, ventas físicas e ingresos por derechos de licencias de música para otros productos como el cine, videojuegos, publicidad, etc.
Debido a los embates de la pandemia, estas cifras se han visto tocadas, sobre todo, los
ingresos de la música en vivo, lo que perjudica a toda una cadena de valor de negocios y empresas que son parte de la industria.
Sin embargo, como una manera de tratar de contrarrestar esta situación, han surgido algunas soluciones con buenos resultados.
Los
conciertos virtuales en modalidad
pay per view (pago por visión) son cada vez más frecuentes en la industria del entretenimiento. A través de esta vía, los artistas han buscado la manera de conectar con su público y de la misma forma generar algunas ganancias económicas.
Esto también ayuda directa e indirectamente a todo un personal de músicos, sonidistas, maquillistas, luminotécnicos, camarógrafos, productores y otros suplidores, quienes vieron detenida su fuente de ingresos por la falta de actividades, desde que iniciaron las medidas para contrarrestar la propagación del coronavirus.
Si no es pago por visión, otra solución es la transmisión y retransmisión de
conciertos auspiciados por empresas, como parte de su compromiso social.
En este sentido, también el Banco Popular auspicia
“El Mundo en Casa", un programa de eventos virtuales que organiza la
Fundación de la Villa de Santo Domingo, los cuales son transmitidos a través de diferentes plataformas digitales y estarán abiertos a todo el público de manera gratuita. En ellos habrá una variada oferta musical y charlas educativas al respecto y se ensalzará el folclore dominicano.
Tan solo en los meses de julio y agosto los
conciertos virtuales en la República Dominicana recaudaron más de 29 millones de pesos,
según datos de medios locales. Esta es una cifra importante, si tomamos en consideración que no estamos acostumbrados a consumir este tipo de contenido bajo una modalidad en línea.
Conciertos dentro de videojuegos
A nivel internacional, ha sido muy llamativa la
estrategia de videojuegos como Fornite, seguidos por millones de jugadores en el mundo. Desde que inició la pandemia, ha realizado conciertos con artistas como Travis Scott, DJ Chris Comstock, más conocido como Marshmello, o el más reciente con
J Balvin.
Con esta singular alianza con el mundo de la música, Fornite busca
ampliar su base de público y dejar claro que hay sitio, más allá de las batallas, para disfrutar de los ritmos del momento.
Esta
integración de la música y los videojuegos no es nueva: comenzó en 2008 con el grupo irlandés U2 en su
concierto virtual para Second Life. Y desde entonces se han registrado contados experimentos, con más o menos éxito.
Ahora, parece ser diferente: la situación mundial ha establecido
cambios profundos en los hábitos de consumo y el contenido en diversas plataformas, entre ellas, la inserción de conciertos en los videojuegos, parece abrir todo un campo nuevo e interesante de colaboración, con millones de personas que asisten a cada uno de estos eventos en línea.
Plataformas para conciertos
Más allá de lugares para escuchar música como Spotify o Apple Music, actualmente existen diferentes plataformas que ofrecen la oportunidad a los artistas de realizar sus
conciertos en formato
streaming, logrando que puedan conectar con un público nacional e internacional y, al mismo tiempo, monetizar estos eventos.
Dentro de estas plataformas que promueven la música podemos mencionar:
-
Vimeo. Ofrece versiones para Android, iOS y PC. Puedes utilizarla totalmente gratis o pagar una mensualidad para disfrutar de otras opciones. El sitio permite compartir, almacenar y hacer
transmisiones en vivo de videos digitales.
-
Youtube es la plataforma de
streaming por excelencia. Durante la cuarentena, numerosos artistas han realizado conciertos en vivo para su fanaticada. A través de esta plataforma, los artistas pueden
monetizar sus conciertos, ya sea con la publicidad insertada en su contenido, por visualizaciones o vía aportaciones directas de sus fanáticos.
- ADN Stream Concerts. Es una
plataforma dominicana que nace con el objetivo de innovar en la forma de hacer y consumir los conciertos musicales, con capacidad de conectar a más de 50,000 personas, sin importar donde se encuentren. Cuenta con una cartelera de conciertos de artistas dominicanos en modalidades pago por visión o video de pago, los cuales se pueden adquirir a través de
tus tarjetas de crédito o débito.
-
Wachao Plus. Es también
una red multiplataforma dominicana, que proporciona contenido en video de pago a pedido (on Demand) o transmisiones en vivo en formato pago por visión (Live Stream PPV). Se puede descargar la app y ver los contenidos en distintos dispositivos.
Ciertamente, al igual que ocurre con otros muchos sectores de la economía, la industria musical después de la pandemia ya no será la misma. Es por ello por lo que los
conciertos en línea se convertirán, necesariamente, en una importante herramienta para los músicos.
Como se ha dicho en numerosas ocasiones,
la música es un lenguaje universal que tiene la capacidad de crear lazos y conexiones.
Despierta la parte emocional de nuestro cerebro.
El poder de la música es tal que incluso
nos sirve de medicina en momentos de ansiedad y estrés, como los que muchos pueden estar viviendo.
Debido a esto no es casualidad que, en estas horas de aislamiento y distancia física, tengamos una mayor necesidad de
escuchar a nuestros artistas favoritos… Aunque por el momento las posibilidades solo nos permitan hacerlo a través de una pantalla.