¿Te pidieron prestada tu cuenta en el banco para recibir dinero del extranjero? Es muy probable que quieran usarla como mula.
Tal vez te estés preguntando qué es una cuenta mula.
Se trata de una cuenta bancaria legítima, que se utiliza para enviar y también para recibir dinero de forma ilegítima, dinero del lavado de activos y otras actividades ilegales.
La realización del delito se efectúa con la ayuda, normalmente involuntaria, de un segundo individuo al que se denomina mula bancaria o mula de dinero.
Es decir, usan al titular como una mula o una marioneta para cometer y esconder su crimen.
El término hace referencia directa a los muleros, personas utilizadas por las redes de narcotraficantes para trasladar droga entre distintos países. En este caso, utilizan tu cuenta bancaria, no para mover droga, sino el dinero negro que proviene de actividades delictivas y cometer así sus fraudes.
Lo importante que debes saber es que ¡la ignorancia de este tipo de actuación fraudulenta no te exonera de responsabilidad penal!
¿Cómo se produce esta situación y a qué debes prestar atención para no caer en algo así?
Este tipo de estafa se produce de muchas formas. Puede darse, por ejemplo, mediante personas que te contactan por redes sociales, foros o apps de mensajería, pidiéndote que le transfieras dinero a un amigo o familiar, o que le prestes tu número de cuenta y tu token por unos días para ellos recibir dinero de otra ciudad o país.
A veces pueden decirte que abras una cuenta bancaria con tu nombre, porque esa persona que te contactó en redes sociales no puede hacerlo por una u otra razón.
Es posible que también que soliciten que vayas al banco y hagas retiros y depósitos para un tercero o que realices retiros y depósitos en cajeros automáticos de cuentas de otras personas.
A cambio de cualquiera de estas acciones, te prometen recompensarte por el “favor" prestado. Incluso puede que te ofrezcan dinero si convences a otros en tu círculo de amistades para que se presten a lo mismo.
Suele ser algo tan sencillo de realizar como recibir dinero en tu cuenta y luego transferirlo a otra o sacar el efectivo y entregárselo en mano a una persona. Un señuelo perfecto para gente desprevenida o en condiciones vulnerables, que quiere ganar dinero rápido.
No caigas en el gancho, porque tiene consecuencias legales, ya que estarías ayudando a una organización criminal, como su cómplice. Es una manera de permitir la corrupción.
Cuando llega la Policía, los criminales desaparecen por arte de magia; las mulas se quedan con las consecuencias y dañan su futuro.
Usualmente, según informan algunos gremios bancarios, el perfil más propenso a ser reclutado como mula de dinero es el siguiente:
- Personas recién llegadas a un país.
- Desempleados, estudiantes y gente con problemas económicos.
- Principalmente, varones entre 18 y 34 años.
El trabajo de tu vida o el concurso en el que nunca participaste
Hay múltiples maneras de ser víctima de esta técnica, por eso es clave estar siempre atento a cualquier tipo de solicitud que se salga de lo habitual.
Por ejemplo, además de pedir tu cuenta prestada para recibir dinero a cambio de una remuneración, puede suceder que te ofrezcan un trabajo o te informen que ganaste algún concurso.
Como en este caso que señala Europol, es muy común que recibas una oferta de trabajo estupenda, en el cual vas a ganar mucho dinero y para el que, curiosamente, no necesitas experiencia o apenas requiere un gran esfuerzo de tu parte. Es el trabajo de tu vida, piensas.
Claro, siempre hay un pero. En esta ocasión, para acceder a la oferta laboral de tus sueños, antes debes hacer un pago para enviarlo a algún proveedor, o alguna excusa que se inventen en el momento.
También se da el caso de que recibes un correo electrónico o una llamada, informándote de que ganaste un premio sustancioso, pero que debes pagar una inscripción a un curso o una membresía para recibirlo. Seguramente, nunca hiciste nada para participar en dicho concurso.
No seas ingenuo y evita formar parte de estas redes de estafadores.
Estafas de romance
También puede suceder que conozcas a alguien en una aplicación de citas o en redes sociales populares como Facebook o Instagram.
Empiezas a hablar con alguien y conectas de inmediato con esa persona, congenias con ella rápidamente. De repente, te está contando cosas de su vida y te pregunta cosas de la tuya, haciéndote creer que su interés en ti es genuino. Incluso te escribe todos los días para demostrarte su “amistad".
Luego, una vez que se ha ganado tu confianza, te comenta que tiene problemas con su familia o, incluso, te dice que quiere visitarte, pero que no tiene dinero para pagar el vuelo. A los ojos de la víctima, la persona está mostrando interés profundo y verdadero en la relación.
Al final del día, no hay interés, no hay relación, no hay trabajo, ni hay ningún premio.
Cuando la víctima cae en el gancho, muy rara vez hay vuelta atrás. Se ve forzada a pagar las consecuencias, ya sean económicas o legales, e incluso, puede perder su libertad.
Según la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos de América (FTC por sus siglas en inglés), en el año 2019 se reportaron pérdidas de unos US$201 millones solo en estafas de romance. Esta cantidad supera el monto de dinero reportado por cualquier otro fraude ante la FTC.
¿Esto significa que debo rechazar y reportar cualquier propuesta que reciba por internet?
No, pero es importante utilizar el sentido común y leer entre líneas.
¿Por qué una persona que acabas de conocer de repente te pide que le transfieras dinero a ella o a un tercero?; o, ¿cómo es que ganaste un concurso en el cual nunca participaste? ¿Por qué me estás ofreciendo un trabajo en el que ganaré mucho dinero a base del mínimo o ningún esfuerzo? Hacerse estas preguntas es esencial, porque nos ayuda a cuestionar las intenciones de la persona que nos ha contactado.
No todo el mundo tiene malas intenciones, pero es mejor prevenir que lamentar, especialmente cuando nuestro dinero o libertad están en juego.
Para evitar convertirte en una mula bancaria, es relevante seguir estos consejos:
- No aceptes ninguna oferta de trabajo o propuesta en la que tengas que transferir dinero sin haber investigado primero. Haz preguntas a la persona que te contacta, investígalo en las redes sociales y asegúrate de que su empresa sea legítima.
- Nunca prestes tus cuentas de banco, tarjetas de crédito o débito, o tu token.
- No transfieras dinero a personas que no conoces, no importa que ellos te hayan ofrecido más dinero por hacerlo.
- Si alguien que conoces te pide dinero por alguna red social, llama a esa persona y confirma que su número de teléfono no haya sido clonado.
- No te dejes presionar por operaciones de urgencia, como eventuales accidentes de tránsito, sin antes confirmar que la situación que exponen es real.
- Si presientes que has sido enganchado en este tipo de red fraudulenta, corta el contacto con los estafadores inmediatamente, y notifica a tu banco y a las autoridades sobre la situación.
Difunde el mensaje. Tal vez tú reconozcas fácilmente este tipo de técnicas para robar dinero, pero puede que otros relacionados en tu círculo no sepan verlas venir. Donde te encuentres este tipo de informaciones, compártelas con tus amigos; nunca sabes quién podría necesitarlas.
Tu responsabilidad
Tus cuentas bancarias, usuario, contraseña y token son para tu uso exclusivo, siempre.
Recuerda que tú eres directamente el responsable ante las autoridades por las transacciones que se realizan con tus cuentas y te arriesgas a ser procesado como coautor de delitos de lavado de dinero, narcotráfico, tráfico de personas, y fraudes, exponiéndote a consecuencias económicas, legales e incluso de privación de la libertad.
Si eres víctima de alguna de las situaciones descritas anteriormente, denúncialo y difúndelo. No permitas que les suceda a otros. Sigue nuestras Pistas de Seguridad para más información.