La fuga de datos en tu pyme puede ocasionarte graves problemas
Si has decidido ser precavido con la información confidencial de tu pyme, lo primero que tienes que hacer es determinar cuál es esa información de tu compañía que merece estar especialmente protegida. Piensa que es una parte más de tu patrimonio empresarial, es algo que te proporciona una ventaja competitiva respecto al resto de tus colegas.
Para empezar, clasifica la información que genera tu pyme (por ejemplo, datos de clientes) y los niveles de restricción respecto a las personas que pueden conocerla.
No debes tener dudas a la hora de poner en funcionamiento todas las medidas, legales o laborales, que te ayudan a cerrar el círculo de acceso a la información confidencial de tu pyme y a imponer consecuencias a quienes se lo salten. Estás son, desde luego, imprescindibles:
Puedes incluir en los contratos una cláusula de confidencialidad, que debe ser firmada por todos los trabajadores que integran la plantilla de tu pyme. Se trata de que se prohíba la revelación de información de la empresa a terceros y debe permanecer vigente en el tiempo, incluso cuando ese trabajador ya no forma parte de tu pyme. Mejor si se detalla la sanción penal correspondiente para quien la incumpla.
Además, establece una política de seguridad, sobre todo en lo que atañe al uso del material informático, con medidas que impidan el uso de los equipos de la empresa para asuntos personales, al igual que el de dispositivos particulares durante la jornada laboral. También, la implantación de controles periódicos en tu pyme y las correspondientes medidas de sanción.
Otra opción es la cláusula de no competencia poscontractual, que supone que el trabajador de la empresa no puede desempeñar tareas que supongan una competencia con tu pyme, por un tiempo determinado tras dejar de formar parte de la plantilla. Eso sí, suele tener que acompañarse de una compensación económica para el empleado que la firma.
También puedes utilizar la cláusula de no concurrencia, dirigida a que la persona no pueda trabajar simultáneamente para ti y para otro si utiliza los conocimientos que ha adquirido en tu pyme.
Pero, el proceso sobre cómo proteger la información confidencial de tu pyme no termina en los trabajadores. Hay que adoptar medidas con nuestros colaboradores, haciendo que suscriban un contrato de acceso a datos por cuenta de terceros o un acuerdo de confidencialidad en casos de transferencia tecnológica.
La verdad es que se hace difícil pensar que cualquiera de los colaboradores que trabajan en tu pyme te va a traicionar. Así que, sin sugerirte que te conviertas en un jefe desconfiado, es importante que sepas cómo mantener bajo control toda la información concerniente a tu empresa.
En caso de que esas informaciones publicadas afecten seriamente la reputación de tu marca, lo ideal sería que consultes a una persona con experiencia en el manejo de la comunicación empresarial e implementes las medidas pertinentes ante los clientes, proveedores y colaboradores de tu pyme.