Llegó la hora de abrir tus alas, lanzarte a comenzar tu negocio propio y convertirte en tu propio jefe. Un factor importante es conocer algunas de las características personales que necesitarás, ya que serás un líder.
Debes tener iniciativa, motivación, innovación, mucha dedicación y trabajar tesonera y sistemáticamente, ya que nadie vela mejor por tu negocio que tú mismo. También, debes considerar desarrollar tus relaciones
interpersonales, porque es probable que vayas a tratar con las personas directamente, sus dudas y quejas, y también tener personal a tu cargo.
Inicia una pequeña o mediana empresa.
Puedes comenzar desde cero, poco a poco, ya sea con tu propio capital o utilizando el de algún inversor. O si prefieres, puedes adquirir un negocio existente.
Un negocio en casa. Con lo cual, te ahorrarás también los gastos de mantenimiento, transportación y alimentación.
Trabaja en la calle.
Si eres bueno con las ventas puedes convertirte en un agente de bienes raíces por cuenta propia.
Invierte en instrumentos financieros o en el mercado de valores.
Si tienes capital, pero no quieres aventurarte con un negocio puedes optar por invertir en certificados a plazo o en el mercado de valores.
¿Cómo lograrlo?
• Identifica tus cualidades y capacidades para saber en qué eres bueno.
• Investiga en el mercado las posibles demandas.
• Define dónde y cómo lo vas a poner.
• Elabora un presupuesto.
• Consigue el financiamiento, ya sea con tus ahorros, préstamos o un inversionista.