Gracias al espíritu emprendedor, cada año afloran y se redescubren lugares para visitar en Santo Domingo. Este año no es diferente, aquí, cinco de ellos:

Helado Dude: el helado para la hija, que ahora es para todos
Un padre que le gustaba hacerle helados a su hija, un día le elaboró un rico y saludable que fascinó a todos. Luego, lo ofreció a unos amigos, quienes le hablaron a otros y, sin imaginarlo, se volvió popular. Esa es la historia de esta heladería, que no ha dejado de estar en boca de todos desde que abrió sus puertas. ¿Por qué? Porque tiene sabores, combinaciones y conos no tradicionales; además, de una impecable estética en su local y en los helados a la hora de servirlos. Para que la visites y lo compruebes está ubicada en la calle Víctor Garrido Puello no. 16, casi esq. Abraham Lincoln.

Microteatro: es cosa de 15
Cultura, arte y gastronomía en una experiencia única. Eso es lo que ofrece Microteatro, un lugar que ofrece obras de 15 minutos para 15 espectadores en salas de menos de 15 metros cuadrados. Todas las obras giran en torno a un mismo eje temático, por lo que los temas cambian cada mes: por locura, por amor, por ellas, etc. Visítalo en la calle José Reyes no. 107, esq. Salomé Ureña, Zona Colonial.

Frío Frío Colonial, lo rico del hielo rallado
Ubicado en la calle El Conde, justo frente a su cafetería llamada “Dúo Lounge”, este pequeño lugar lleva la conocida y pintoresca bebida del hielo rallado a nivel de bar, ofreciendo la bebida con o sin alcohol. Ideal para degustar antes de una caminata dominguera. Visítalo en el Conde 464, esquina Espaillat.

ChocoMuseo: el mejor chocolate latino
Ofrecen “el mejor chocolate de la República Dominicana". Están ubicados en un edificio del siglo XVI en la Zona Colonial. La especificación del lugar surgió porque Chocomuseo cuenta con más de 25 tiendas museo distribuidas en Latinoamérica, donde ofrecen una experiencia 100% chocolatera, en los países agricultores de cacao. En la República Dominicana, la franquicia ya tiene cinco centros. La experiencia aquí es que los visitantes aprendan un poco el mundo del chocolate a través de un recorrido que muestra espacios exclusivos para la enseñanza de las virtudes de esta planta. El resultado final es delicioso: un chocolate hecho por los propios visitantes. Uno de los centros está en la Calle Arzopispo Meriño no. 254.

Paletas bajo cero
Este lugar es ideal para pasar un rato agradable y refrescante en la Zona Colonial o en Piantini, donde acaba de abrir. Y es perfecto para disfrutar de paletas 100% naturales, pues son elaboradas con frutas tropicales sin aditivos ni conservantes. Aquí se descubre todo, desde las de chinola rellenas de leche condensada hasta mango con chocolate. Lo mejor es que tienen tantos sabores que el único problema que tendrás es elegir una. Además, ¡venden café! Disfrútalo en la Calle Isabel la Católica no. 165