A medida que va avanzando la tarde la luz se hace cada vez más cálida y débil y las sombras se van alargando creando formas interesantes. Al igual que el principio de la mañana, es una buena hora para casi todo tipo de fotografías, las texturas se resaltan dando oportunidad para buenas fotografías de paisajes y ciudades, así como para retratos con la ventaja de no tener que madrugar para estos fines.
El atardecer es uno de los temas preferidos de la fotografía debido a la gran gama de colores que presenta la luz en este WQmomento. Las nubes cambian de forma y color constantemente dando oportunidad a resultados espectaculares , auque a la vez es muy fácil caer en una fotografía común y trillada. Para evitar esto debemos poner atención en los demás elementos y primeros planos que tengamos en nuestro entorno, creando así siluetas y ángulos que nos permitan hacer algo más original y creativo.
La denominada hora azul comienza unos 10 minutos después de ocultarse el sol. En ese momento se da un equilibrio entre la luz natural y las luces artificiales de carros y ciudades. Los efectos y contrastes de la luz fría y la cálida, aportan una magia especial.
Esta es la hora ideal para fotografíar de arquitectura.
Y por último, nos queda la noche.
Esta puede tornarse un poco más desafiante y experimental, ya que necesitamos la ayuda de un trípode para poder captar más luz e ir descubriendo colores y detalles en las sombras que el ojo humano, en la mayoría de los casos, no percibe. Los efectos y resultados suelen ser emocionantes y poco comunes ya que se combinan diferentes colores y tipos de luces de edificios, carros, faroles y la luna.