Las tarjetas de crédito tienen múltiples ventajas y si se utilizan con responsabilidad pueden ser una potente herramienta para complementar la capacidad de compra y la administración financiera de su poseedor.
Además de la práctica ventaja que implica tener una fuente de recursos hábil para resolver emergencias, suman muchas otras más las virtudes de este producto financiero que siempre debe ser visto como un instrumento de pago.
Entre ellas están:
- Crea
historial de crédito, con cual se tiene más posibilidades de obtener financiamiento futuro.
- Permite acceder a
ofertas y descuentos especiales.
- Sus planes de lealtad generan puntos o millas, que se pueden canjear por un amplio abanico de opciones, desde reservas en hoteles, bonos de compra, boletas para espectáculos o hasta billetes de vuelo.
- Facilita el día a día a través de los pagos que se pueden automatizar.
El funcionamiento de una tarjeta de crédito es relativamente sencillo. Con el dinero que tiene asignado puedes realizar compras y retiros en efectivo hasta el límite asignado.
Puedes ver el registro de los consumos a través de la banca en línea o también en los estados de cuenta que remiten las entidades bancarias. En ambas partes podrás visualizar la cantidad total o el saldo mínimo a pagar, en caso de no poder realizar el saldo total. Puedes optar también por la modalidad de pago diferido en las cuotas que necesites y te permitan.
En las tarjetas de crédito solo se cobran intereses si se realizas el pago mínimo, pero
si pagas el total de lo consumido, antes de la fecha de corte, no se cobran intereses y solo tendrías que pagar el costo por la renovación del producto.
Y ahora una pregunta frente: ¿cómo evitar endeudarse con la tarjeta de crédito? Pues, sencillo: ¡siendo organizado!
- Utiliza tu tarjeta como un medio o instrumento de pago. Es decir, dinero que consumes con ella, dinero que vuelves a pagar. Si es posible, antes del corte de la tarjeta.
Evita las compras compulsivas.
- Siempre paga la totalidad del monto consumido. Si no puedes, pues paga siempre lo que más puedas.
- Consume en función de tus ingresos y guarda los recibos de consumo, en caso de tener que hacer reclamaciones. Que
tu guía siempre sea tu presupuesto.
- Conoce la fecha de corte, momento en el que se hace el cierre del mes con tus consumos pagados en dicho periodo. Organiza tus consumos, teniendo en cuenta siempre la fecha de corte.
- En las compras por internet, verifica que realizas tus compras a través de páginas confiables que cuenten con elementos de seguridad.
Hay muchas opciones de tarjetas de crédito en función de los intereses del cliente. En el Banco Popular Dominicano tenemos
un comparador para que encuentres la que más te convenga. Sé prudente y obtén el máximo de este útil producto financiero.